Llicua pide resarcimiento por daños a su capilla a cusa de muro de contención
Parte de la capilla del centro poblado de Llicua se demolió hace casi dos años para la obra del muro de contención de la quebrada Agorragra, pero hasta ahora no recibe el resarcimiento del Gobierno Regional ni el Consorcio se hace cargo.
La capilla que tiene varios siglos de antigüedad está a la intemperie debido a la demolición de uno de los muros del patio. «Hay personas de malvivir por ahí y han sustraído las cosas de la capilla, bancas, maderas», se quejó Marcos Gutiérrez Baldeón, presidente del comité pastoral del lugar.
Cuenta que cuando inició la construcción del muro de contención de la quebrada, el Consorcio Llicua, que ejecuta la obra desde el 2022, solicitó a la población usar el patio de su capilla como su almacén y la población accedió.
«Les dimos parte del patio para que guarden máquinas y para su centro de acopio. Cortaron una pared, teníamos una tribuna ahí donde entraban los vecinos para las fiestas patronales y eso también se eliminó; todo con el compromiso de que se iba a resarcir después; pero ya se olvidaron de su compromiso», se quejó.
Cuenta que ya en varias ocasiones se reunieron con los representantes del Consorcio Llicua, quienes los envían con el Gobierno Regional para que se encargue del resarcimiento con el Pacri (Plan de Compensación y Reasentamiento Involuntario), pero hasta ahora no se concreta el reembolso.
La capilla perdió un muro de casi setenta metros de largo y hasta ahora no pueden volver a usar el patio.
Ante esta situación, los pobladores amenazan con paralizar la obra. «De hacer caso omiso a nuestra incomodidad y perjuicio a la capilla, estaremos realizando un plantón y a la vez el impedimento de sus labores diarias», dice un oficio enviado a los representes del consorcio.