Más de S/ 800 mil costará reparar el resonador magnético del hospital Valdizán
Más de 800 mil soles costaría reparar el resonador magnético del Hospital Regional Hermilio Valdizán Medrano que dejó de funcionar por una fuga del helio. Mientras tanto, los pacientes que esperan usarlo tendrán que pasar por el tomógrafo.
Según el director de dicho nosocomio, Gustavo Barrera, ayer la empresa General Electric trajo los repuestos que requiere el resonador magnético: el cabezal y el compresor, que tienen un costo de 297 mil soles.
Pero para ponerlo en funcionamiento también se requiere casi tres mil litros de helio y nitrógeno, gases que se usan para el enfriamiento de la máquina y que costarían más de medio millón de soles.
«Esos gases se compran en el extranjero; una empresa transnacional nos dice que lo puede traer de Estados Unidos en veinte días, pero a partir de que se firme el contrato con el hospital. Estamos realizando todo el trámite para el presupuesto», señaló el funcionario.
De acuerdo con sus declaraciones, el resonador empezó a registrar una disminución del helio desde el pasado 19 de julio. Si bien se llamó a la empresa General Electric para que evalúe el equipo, esta exigía una contratación inmediata, lo cual no era posible por el alto monto a pagar: 297 mil soles por las piezas que había que cambiar.
Es por eso que el pasado 13 de agosto, justamente un día antes de que lleguen los trabajadores de General Electric, todo el gas de la máquina salió disparado por los ductos del hospital hacia el exterior. A raíz de este suceso, también se debe comprar el helio y nitrógeno.
Este resonador, de acuerdo con Barrera, tiene más de tres años en funcionamiento. Desde que se le acabó la garantía tuvo dos mantenimientos, uno en noviembre del año pasado y otro en mayo de este año por la empresa General Electric. «Es la única empresa que puede ver estos equipos», afirmó.
TOMÓGRAFO DE AUXILIO
El director del hospital informó que hay entre cincuenta a setenta pacientes que esperaban pasar por el resonador magnético, principalmente con cáncer o para el área de neurocirugía; pero tras este incidente tendrán que pasar por el tomógrafo que sí está en funcionamiento.
«No se está poniendo en riesgo la vida de los pacientes, porque tenemos un tomógrafo en buen estado. Claro que una resonancia es de mayor capacidad, pero el tomógrafo puede suplir al resonador», aseguró.