La extrapolación en la lectura

Livio Álvarez Lázaro

La inferencia en la lectura es un proceso indispensable para la comprensión cabal del texto. La inferencia permite cubrir los vacíos de información que el autor ha dejado de forma intencional al estructurar la trama textual. El lector, por su parte, debe reconstruir los implícitos a partir de los datos expuestos de forma literal. Como podemos notar el acto de leer implica comprender los explícitos que se presentan en el texto de forma literal y amalgamarlos con los implícitos que cubren los vacíos de información textual. De esta forma tenemos el entendimiento completo del texto que se lee. A este proceso, podemos añadir un tipo de inferencia potente que es considerada la cima de la lectura en el nivel inferencial. Nos referimos a la extrapolación y en esta ocasión es motivo de nuestra atención en el presente artículo.

En primera instancia, revisemos la interesante propuesta de Raymundo Casas respecto a la inferencia. «¿Qué es la inferencia? Se trata de un proceso natural que sirve para deducir la información implícita de un texto. Para operar con inferencias, es vital que el lector establezca esquemas e interpretación y cuente con información suficiente. Al hacerlo, puede establecer una relación en términos de premisas y conclusión». Casas resalta la importancia de operar con inferencias, por eso sostiene que es necesario que el lector disponga de conocimientos previos, experiencias y un conjunto de reglas o esquemas mentales que le permitan interpretar lo que lee. Y es esta base necesaria para realizar la extrapolación en la lectura.

Y ¿qué es extrapolar? Revisemos su etimología. Este vocablo deriva del término interpolar, registrado en el idioma español en el año 1605, del latín «interpolare» (cambiar, alterar). Sobre la palabra interpolar se cambió el prefijo «inter-» por «extra-», dando origen a la palabra extrapolar. En este contexto lexicológico, la RAE precisa que extrapolar es «Aplicar a un ámbito determinado conclusiones obtenidas en otro». Así, extrapolar implica tomar una idea, un concepto o una conclusión del texto leído y aplicarlo a una situación, hecho o ámbito diferente. Entendido de este modo, la extrapolación lectora es una inferencia compleja que consiste en la realización de hipótesis o supuestos razonados que se proyectan fuera del texto tomando como fundamento la tesis o la idea principal del texto leído.

Por otro lado, existen diversos matices o formas de efectuar la extrapolación en la lectura, lo cual será motivo de otro artículo. Por ahora, veamos lo esencial con un ejemplo práctico. Sin embargo, cabe aclarar que, para todas las tipologías, no se deben incorporar en absoluto la imaginación, creatividad o posición ideológica del lector debido al hecho fundamental de que el objetivo de la lectura es desentrañar el texto en todas sus facetas para finalmente auscultar el pensamiento íntimo del autor. Al incorporar sus ideas, el lector, estaría cumpliendo el rol de seudo autor y quebrando el normal funcionamiento de la comunicación textual.

Aclarados los fundamentos de la extrapolación en la lectura, apliquemos la teoría a una breve narración de Paulo Coelho.

Ahora bien, apliquemos lo expuesto al texto Los dos monjes de Coelho, haciendo la siguiente interrogante: ¿Qué sucedería si Ekido hubiese cargado a la hermosa joven? Como podemos notar, la pregunta es muy diferente a las interrogantes literales e incluso a las inferenciales. Plantea un hipotético «qué hubiera sucedido» para luego extrapolar o trasladar los eventos acontecidos de Tanzan a Ekido. Ahora, vamos por la respuesta. Sería muy atrevido hipotetizar que Ekido es un monje lujurioso; sin embargo, es posible extrapolar que entre dos personas, la interpretación de las reglas y los principios pueden diferir según la perspectiva individual. Por su parte, Tanzan, al ayudar a la hermosa joven, demostró una interpretación más flexible y compasiva de las normas monásticas; así que priorizó la acción humanitaria de compasión sobre una comprensión literal de la regla de no tocar a las mujeres. En este sentido, precisemos que Ekido no hubiera sido capaz de cargar a la joven; sin embargo, la pregunta exige hipotéticamente que sí lo ejecute. Por lo tanto, se extrapola que Ekido, luego de cargar a la joven entendería que la compasión y amor al prójimo priman antes que las reglas y preceptos establecidos. Y así, Ekido dejaría de «cargar» en sus pensamientos a la hermosa joven.

Finalmente, sostenemos que la extrapolación es una forma avanzada de inferencia, la más compleja en toda la lectura. Su constante práctica, con razonamientos proyectivos a partir del texto, como experimentamos en el ejemplo anterior, desarrolla el pensamiento de orden superior en los lectores. Por esta razón, al efectuar la extrapolación, los lectores están muy involucrados en la construcción de significados y en la aplicación de lo leído a nuevas situaciones. De igual forma, al ejercitar la lectura con razonamientos proyectivos, con información basada en el texto, los lectores fortalecen sus capacidades cognitivas y ascienden a una postura más crítica y creativa. Entonces, ahora ya sabemos que la lectura no es una simple recreación académica; sino un aprendizaje significativo de activación de conocimientos previos, esquemas de base y extrapolaciones que derivan en un aprendizaje más profundo y perdurable.

     
 

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