De las palabras a las medidas
En los últimos días se han reportado casos de agresión racial en partidos de fútbol en España y Argentina, que no son nuevos, lamentablemente. Las agresiones a los futbolistas comparándolos con animales es un viejo problema que no se enfrenta con la dureza que corresponde para erradicarlas de los escenarios deportivos.
Lo sucedido con el jugador brasilero Vinicius Júnior del Real Madrid (España) ha merecido la condena y el rechazo generalizado de deportistas, directivos del fútbol español y mundial, líderes políticos, entre otros. Sin embargo, falta estudiar las medidas de sanción que se debieran aplicar ante las agresiones que se lanzan desde las tribunas.
Una propuesta que se ha estado deslizando es la suspensión del partido de fútbol en cuanto inicie la agresión racial. Esa podría ser una fórmula, pero también hay que analizar que esa situación no sea aprovechada por los fanáticos de un equipo cuando el partido le es adverso o cree que suspendiéndolo le iría mejor o le daría una chance para enmendar errores.
La suspensión del partido y la asignación de los puntos para el equipo de la víctima, podría ser otra fórmula. Además de la multa para el equipo cuya hinchada participó en la agresión.
La tecnología también debería usarse para identificar a los agresores que están en la tribuna. Es momento de pasar de las palabras a implementar medidas de sanción drástica.