Juez anticorrupción dicta primera prisión en caso de la escuela policial

El juez Samuel Cabanillas Catalán, del juzgado anticorrupción, emitió el viernes la primera prisión preventiva en el caso «Los Elegantes de la Formación»  que habría operado en la Escuela de Educación Superior Técnico Profesional Policial con sede en Santa maría del Valle entre los años 2022 y 2023, según un testigo protegido. Su versión ha sido corroborada por diversos elementos de convicción que el fiscal del caso ha sustentado en las audiencias iniciadas el 3 de enero.

En audiencia desarrollada la tarde del viernes, el juez dictó prisión preventiva por el plazo de 36 meses contra el director del centro de formación policial,  comandante Christian Toledo Loli, quien es acusado de liderar la organización.

Contra él, la Fiscalía ha presentado una serie de conversaciones en la que él mismo participa haciendo énfasis en los cobros.

En una de las primeras conversaciones, uno de los estudiantes le indica que su papá ha llegado y que le haría la transferencia, sin precisar el concepto.

Luego, otro alumno de su confianza le informa «varios de mis promociones se me han acercado, tienen incomodidad por la rendición de cuenta» y le manifiesta que «están queriendo tomar medidas legales» a lo que el investigado pregunta: ¿Quién está diciendo eso?, para luego señalar: ¡Ah ya!, «Valderrama ya llega el lunes acá, tranquilo nomás».

Pero luego le dice a quien llama ahijado: ¿Oe, quién te va a denunciar, te van a denunciar, ellos estando en la escuela, crees que van a hacer eso?».

Incluso el alumno responde: «Tanta vaina, hablen con el capitán Valderrama. Nosotros te hemos dado a ti y a Vega me dicen así».

Continuando la conversación, el alumno le indica que ha ido a buscar locales para la fiesta de la promoción 2023, pero el director dice: «Ya, segundo pa mi cumpleaños ya está tasando para este».

A lo que su interlocutor le indica: «Tienen que centralizarme los brigadieres los 30 soles nada más».

Sobre la fiesta de promoción, Toledo Loli plantea a su hombre de confianza «hay que hacer la fiesta acá, hacemos algo sencillo, no tan sencillo».

El mismo estudiante le comenta: «Hay algunas secciones que no centralizan por el tema de que hoy día está pidiendo el Ñol (mayor Solano), esta semana está pidiendo los cien soles para la “chicha” (DACA) todo eso…»

En otro momento, el comandante le recuerda: «Pero los 20 soles sí hoy día tienes que darme», y el  recolector responde: Sí, sí, los 20 soles sí, yo lo tengo ahí.

Le informa también «ya que el viernes tengo que ir con el capitán Alama para lo de su laptop, para comprarle su laptop».

Según la teoría fiscal, con las interceptaciones  se ha puesto al descubierto que la actividad principal de la organización viene a  ser de recibir y centralizar dinero recolectado por servicios realizados en la escuela.

En los diferentes diálogos captados, se escucha al exjefe de la escuela policial expresarse con lisuras, insultos y amenazas a quienes se niegan a pagar. Incluso en una ocasión amenaza: «Los voy a colgar csm», refiriéndose los que integrarían el llamado grupo 7.

«Este 14 se va a quedar el grupo 7, este sí es ejemplo, a ese grupo le voy a colgar como ejemplo, porque ahí se van a quedar ahí. Crees que el grupo 6 y 5 van a querer quedarse?», para luego ordenar a su interlocutor que todos deben pagar por concepto de útiles y este a su vez le da los nombres de quienes no pagarían.

En las conversaciones también se señalan a los otros oficiales investigados como parte de la organización criminal.

Durante la investigación, mientras estaban detenidos, cuatro alumnos confirmaron los cobros de dinero por diferentes conceptos que realizaban tanto el comandante Toledo, como los otros oficiales.

El fiscal señaló también que la organización ha causado daño económico a 193 alumnos.

Al sustentar su pedido de prisión preventiva, el fiscal Rojas señaló que la pena que le correspondería por los delitos de organización criminal y cohecho pasivo propio en el ejercicio de la función policial sería de 20 años de prisión.