Más de catorce policías procesados por violar las medidas sanitarias
Inspectoría de la PNP separó preventivamente a todos los investigados.
Al menos 14 policías que laboran en la jurisdicción del departamento de Huánuco son procesados penal y administrativamente por el Ministerio Público y la Inspectoría Regional de la Policía Nacional, respectivamente, por violar presuntamente las medidas sanitarias dictadas por el Gobierno para evitar la propagación del nuevo coronavirus.
Entre los primeros detenidos están los suboficiales PNP Edgar Campean Raymundo y Juan Jesús Huamanta Samaniego, quienes laboraban en la Comisaría de Yuyapichis (Puerto Inca). Ellos fueron acusados de reunirse con mujeres en el vehículo del primero, en pleno toque de queda. Aunque negaron haber cometido el delito, sus acompañantes menores de edad los comprometieron. Ocurrió el 5 de mayo.
Diez días después, en la ciudad de La Unión, provincia de Dos de Mayo, los suboficiales PNP Lelis Caqui Meza y José Malpartida Trujillo fueron intervenidos por miembros del Ejército Peruano cuando también habrían estado libando en compañía de mujeres. En lo que respecta a ellos, el fiscal que los investiga solicitó al Juzgado de la provincia dar trámite a su pedido de proceso inmediato.
Ese mismo mes, el día 24, en Paucarbamba fueron detenidos el alférez PNP David Vásquez García y los suboficiales Katherin Casimiro Gómez, Evelyn Bustamante Palomino y Eduardo Espinoza Ruiz en circunstancias que habrían estado celebrando el cumpleaños de una de ellas.
Policías de la Comisaría de Amarilis llegaron hasta la vivienda ante la denuncia de una de las vecinas que se quejaba de la bulla que hacían.
Otros dos policías fueron detenidos también en mayo cuando en estado de ebriedad protagonizaban escándalo. Ambos suboficiales se encontraban aislados por haberse contagiado con la covid-19. Uno de ellos laboraba en Lima.
La última intervención ocurrió el 15 de junio en la ciudad de La Unión, provincia de Dos de Mayo. Los suboficiales Edu Figueroa Meza, Luis Fretel Cueva y Grisy Romayna Lijarza son acusados de libar en una de las habitaciones del hotel Karol junto con otro suboficial que estaba aislado por haberse infectado con la covid-19.
Los policías mencionados son investigados por el delito de desobediencia a la autoridad y violación de las medidas sanitarias, pero además el órgano de control de la Policía Nacional los investiga por las graves infracciones que habrían cometido: contra el servicio policial, contra la disciplina y contra la imagen institucional, incluso ha dictado medidas preventivas contra ellos de suspensión temporal.