Ocho años de cárcel para taxista que quiso matar a pasajera
A seis años de que una madre de familia fuera víctima de feminicidio en grado de tentativa, las autoridades judiciales condenaron en primera y segunda instancia al taxista Tercero César Pérez Príncipe quien se encuentra en una prisión desde febrero del año 2020. El caso ocurrió en la ciudad de Aucayacu, distrito de José Crespo Castillo, provincia huanuqueña de Leoncio Prado.
El intento de feminicidio de Sarita Ávila Piñán se perpetró la noche del 18 de julio del año 2016. Aquel día, ella y sus amistades se dirigieron a una discoteca donde estuvo hasta las primeras horas del día siguiente. Salió en compañía de un joven que se ofreció acompañarla y subieron a la mototaxi del sentenciado.
No avanzaron mucho porque el joven tuvo que bajarse del vehículo para volver al local pero antes le dejó 4 soles para el pasaje que la agraviada entregó al conductor y decidió irse caminando.
Según manifestó la agraviada, el taxista ya se estaba yendo pero dio la vuelta y la alcanzó. Le dijo que subiera a su vehículo y que él la llevaría, pero ella respondió que prefería caminar. Pero el conductor insistía e iba tras ella, incluso estacionaba su vehículo delante de ella que continuaba negándose a subir hasta molestarse con él y gritarle que no quería que la lleve.
El sujeto simuló dejarla ir, pero apenas avanzó unos pasos la agarró del cuello con su brazo y la presionaba dejándola casi sin respiración para que no pudiera defenderse.
Sarita relató a las autoridades que ella le pedía a su agresro que por favor la soltara, que tenía una bebe, pero él continuaba presionándole el cuello e incluso golpeó su cabeza contra el vehículo cuando logró arañarlo en su afán de zafarse.
La madre de familia dijo que su agresor continuaba presionándola del cuello y de pronto ya no sentía dolor y perdió la conciencia.
Al despertar, la agraviada dijo que el sujeto la tenía en el piso y cuando intentaba pedir auxilio nadie la escuchaba. Es cuando él intenta subirla a su vehículo, pero ella continuaba pidiendo auxilio hasta que su voz fue escuchada por algunos lugareños que pasaban a distancia.
Al ver que las personas se acercaban, el mototaxista huyó en su vehículo.
Con apoyo de los vecinos, Sarita dijo que pudo volver a su casa para luego contar a su hermana y denunciar lo sucedido ante las autoridades policiales. Sus lesiones fueron certificadas por el médico legista que la evaluó como parte de la investigación.
Durante las investigaciones a cargo del Ministerio Público y Policía, Sarita reconoció plenamente a Tercero Pérez, trabajador del establecimiento de salud de Aucayacu, como la persona que intentó matarla.
DEFENSA
Ante los jueces de la Sala de Apelaciones de Tingo María, Pérez Príncipe dijo que el día de los hechos «se encontraba en su domicilio con su esposa y sus hijos, que no es un taxista, que trabajaba en el centro de salud de la ciudad de Aucayacu y que no conoce a la agraviada».
Para los magistrados de la Sala Mixta, «la declaración de la víctima es clara, coherente y circunstanciada al describir los hechos; esto es, la coacción y posterior agresión con fines de muerte, que le ocasionó el inculpado Tercero César Pérez… pues el nivel de precisión del relato incriminatorio es indiscutible…».
Además de cumplir la pena, el sentenciado deberá pagar la suma de 5000 soles de reparación civil a su víctima.