Reconstruyen muerte de cantante en manos de sereno

Sin la participación del sereno César Augusto Farfán Andrade, la mañana de ayer se reconstruyeron las circunstancias en las que falleció el cantante Jharel Isuiza Díaz, el 19 de noviembre del año pasado, en el distrito de Amarilis.

A la diligencia dirigida por la fiscal Lali Apaza asistieron el suboficial PNP Kennji Albornoz Valerio, así como el conductor del automóvil del Serenazgo de Amarilis, en el cual falleció Isuiza Díaz, pero no se presentó el principal investigado, César Farfán. Se supo que su abogado presentó un escrito justificando su ausencia.

Pero la reconstrucción se desarrolló con la participación del suboficial Albornoz y el conductor, en presencia del abogado de Farfán, frente al Minimarket Líder, ubicado en la vía Colectora. Mientras tanto, la familia del fallecido realizaba un plantón con carteles pidiendo justicia.

El efectivo policial recreó las circunstancias en las que intervinieron a Isuiza. Contó a la fiscal que el joven tuvo que ser esposado antes de ingresar al vehículo de Serenazgo debido a que puso resistencia a la intervención.

Según la reconstrucción de los hechos, el joven fue ingresado al vehículo acostado, mientras su cabeza estaba sobre el regazo del sereno, que lo sujetaba del cuello. Estaban en dirección a la comisaría cuando se percataron que no reaccionaba por lo que lo llevaron al centro de salud Carlos Showing Ferrari, a donde llegó sin vida.

Como se recuerda, Jharel Isuiza Díaz falleció en una confusa intervención del efectivo policial y sereno de Amarilis. Aparentemente causó desmanes dentro del minimarket, adonde llegaron los efectivos que realizaban patrullaje integrado.

Al ser intervenido, Jharel puso resistencia y en un intento por reducirlo habría sido asfixiado por el sereno, según la hipótesis fiscal.

César Farfán y el suboficial Kennji Albornoz, son investigados en libertad con comparecencia con restricciones.

     
 

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