Exfiscal condenado a 8 años de cárcel por corrupción es capturado por policías de la Dircocor
A casi tres años de evadir a la justicia, el abogado Loris Eduardo Arias Carbajal fue capturado por policías anticorrupción de Huánuco que obtuvieron información de que presentaba una requisitoria por una condena de 8 años de pena privativa de la libertad que dictó la Corte Suprema de Justicia al resolver un recurso de apelación.
En diciembre del año 2012, cuando Loris Arias se desempeñaba como fiscal de la Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Lauricocha fue acusado por un padre de familia de haberle solicitado la suma de 4 000 soles para liberar a su hijo detenido por violación sexual.
La investigación fue asumida por un fiscal superior que al finalizar las diligencias y reunir las pruebas llevó el caso a juicio oral que estuvo a cargo de la Sala de Apelaciones de Huánuco. En octubre del 2019, dos de los tres jueces superiores lo absolvieron.
Al no estar conforme con el fallo de primera instancia, el Ministerio Público acudió a la Corte Suprema de Justicia que sí lo encontró responsable del delito contra la administración pública, en la modalidad de cohecho pasivo específico, y lo condenó a pasar 8 años tras las rejas.
Así, los jueces supremos de la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema de Justicia de la República ordenaron su ubicación y captura.
En la sentencia de fecha 30 de mayo del 2022, los magistrados fijaron la suma de 30 000 soles por concepto de reparación civil.
La mañana del sábado, agentes del Departamento Desconcentrado de Investigación contra la Corrupción (Dircocor) Huánuco que seguían los pasos del abogado llegaron hasta un local deportivo ubicado en la calle Los Manglares, Amarilis, y lo detuvieron.
DENUNCIA
Guzmán Leandro denunció que el 12 de diciembre del 2012 llegó al Ministerio Público de Lauricocha y preguntó los motivos de la detención de su hijo, circunstancias que un trabajador lo llevó a la oficina del ahora sentenciado quien le pidió un aporte de 3 a 4 mil soles y que haría lo posible para liberar a su hijo.
Ante ello el padre decidió vender sus animales; pero el mismo día su hijo fue liberado al haberse cumplido la detención preliminar de 24 horas que el entonces fiscal adjunto Miguel Jesús Lévano (fallecido) había requerido al Poder Judicial ante una denuncia por el delito de violación sexual.
No obstante, al día siguiente, los fiscales Arias Carbajal y Lévano salieron en una camioneta de la institución y se dirigieron al distrito de Jivia y cuando estaban cerca se encontraron con el denunciante quien sindicó a Loris Arias de haberle preguntado por el trato y enseguida le mostró la orden de libertad firmada por su hijo y el fiscal del caso.
El padre de familia dijo que los fiscales le exigieron el cumplimiento de lo pactado y es cuando entregó la suma de 3 000 soles.
Horas más tarde, Guzmán se presentó a la Fiscalía y ante otro fiscal denunció el hecho de corrupción. En su defensa, el acusado negó los hechos, pero reconoció que salieron en dirección a Rondos por un caso de violencia familiar, pero que no llegaron por el mal estado de la carretera.
Para resolver el recurso de apelación, los jueces supremos presididos por César San Martín analizaron minuciosamente la resolución de los jueces de la Sala Penal Especial de Huánuco, las coartadas del exfiscal y las pruebas presentadas por el Ministerio Público para concluir que el hecho ilícito estaba acreditado. «Luego, de acuerdo con la ponderación adecuada de los medios de prueba, se determinó que el aludido encausado actuó con una conducta dolosa, infringiendo sus deberes funcionales», dicen.