La Barquera, 25 años después
Desde los últimos días de agosto se ve más movimiento y algarabía alrededor del Colegio San Vicente de la Barquera. Algunas veces han vestido con su característico blanco, amarillo y azul las calles huanuqueñas con pasacalle y desfiles, despertando la curiosidad de algunos vecinos de saber más de este colegio al servicio de la comunidad. Aquí una reseña de su historia. La Institución Educativa Privada San Vicente de la Barquera lleva el nombre del santo católico mártir que vivió en la región de Cantabrias, España, de quien se dice tenía daba gran valía a los jóvenes.
Y este 23 de setiembre, Día de la Juventud, dicha institución educativa celebrará sus bodas de plata; es decir, cumplirá sus primeros 25 años al servicio de la comunidad huanuqueña y de la educación de calidad en sus tres niveles.
El San Vicente de la Barquera inició su actividad en el año 1999 en el segundo piso de Automotores Carrión, jr. Dos de Mayo cuadra 6, con alumnos de 1ro, 2do y 3ro de secundaria. Su primer director fue el profesor Moisés Zamudio Garay y lo acompañó un equipo de docentes con perfil preuniversitarios en su mayoría de la ya conocida por esos días academia preuniversitaria Aseuni (Asesoría Universitaria). Sus siguientes directores fueron Pablo Céspedes Jorge, Freddy Sotomayor Herrera y, actualmente, Benito Chamorro Bermúdez.
Sus tres fundadores: Enrique Salazar Acosta, Edwing Valladares Cisneros y Arlindo Luciano Guillermo, comprendieron la necesidad de dar servicio educativo de calidad en la región como en los mejores colegios de la capital, a presupuesto justo.
Ante el crecimiento de la población escolar, se trasladó a las instalaciones de la Cooperativa de Ahorro y Crédito San Francisco presidido en esos años por la recordada señora Ethel Rolando Soria. El segundo piso de esa entidad les fue alquilada y llegó la consolidación como colegio de exigencia y calidad educativa.
Entre los primeros logros del San Vicente de la Barquera está el primer puesto en el concurso escolar «Los que más saben» de Radio Programas del Perú. Los estudiantes triunfadores fueron recibidos en Huánuco con honores y aclamación multitudinaria.
En el 2004, Enrique Baldeón López se convierte en el único promotor de dicho colegio apostando por el uso de las herramientas físicas y digitales que garanticen que los alumnos egresen con las capacidades necesarias para un mundo cambiante.
A partir de ese año, el reto fue tener un local céntrico, amplio y moderno para que docentes y alumnos tengan la comodidad en sus quehaceres educativos, y de esta manera no solo pretender cultivar el intelecto del estudiante frente a libros y equipos de cómputo, sino también en amplios laboratorios, canchas deportivas y espacios de ocio productivo.
En el 2009 el colegio San Vicente de la Barquera se traslada a su amplio local en el jr. Crespo y Castillo. Luego, incorpora sus instalaciones de nivel inicial con una construcción cuidadosamente diseñada para cubrir las necesidades de los más pequeños de 2 a 5 años, cuyo acceso es por el jr Bolívar. Con más de 4 000 metros cuadrados y 5 pisos de infraestructura moderna y segura destinados a la educación de los niños y jóvenes huanuqueños se cumplen las 3 metas de la promotora: infraestructura idónea y propia, posicionamiento en el mercado educativo y mérito académico, artístico, deportivo, científico y cultural, bajo el lema «educación de calidad y competitiva» aplicando metodología propia: Educación Eco-integral con el uso de las tecnologías de información.
El San Vicente de la Barquera acoge a la fecha a mil alumnos y en 25 años han egresado 22 promociones, más de 2 000 jóvenes orgullos de ser vicentinos que pasaron a prestigiosas casas de estudios superiores, algunos en la región, la mayoría en la capital (Cayetano Heredia, San Marco, Universidad de Ingeniería, La Católica, Pacifico entre otras) y también en el extranjero.
Varios de ellos, exitosos profesionales y agradecidos exestudiantes, repiten el ciclo de vida con sus hijos encargando su educación a su alma mater.
«Los 25 años del San Vicente es haber alcanzado el más alto escalón de las metas», afirma su director Benito Chamorro Bermúdez.