El perro de Alcibíades

El buen Plutarco, famoso historiador y biógrafo griego, relata una curiosa anécdota que bien vale la pena recordar. Resulta que el famoso general ateniense Alcibíades, nieto de Pericles y discípulo de Sócrates, en una ocasión mientras estaba al frente del gobierno de Atenas se había comprado (o conseguido) un perro muy gallardo y simpático al que un día le cortó el rabo, sin razón aparente, provocando la condena y crítica de la gente, quienes empezaron a cuestionar al famoso general por un hecho tan extraño y cruel.