¿Qué es internet de las cosas y cómo funciona?
Internet de las Cosas es una traducción de la expresión en inglés Internet of Things (IoT), que describe un escenario en el que diversas cosas están conectadas y se comunican. Esa innovación tecnológica tiene como objetivo conectar todo lo que usamos diariamente a internet, con el objetivo de aproximar cada vez más el mundo físico al mundo digital.
Este término nace debido a que estamos en un mundo cada vez más acelerado, con múltiples ocupaciones y la falta de tiempo de las personas genera la necesidad de conectarse en internet de nuevas maneras. Estas permiten la creación de dispositivos que ejecutan tareas que no necesitamos hacer. Estos dispositivos “conversan por medios de diferentes protocolos” dentro de la misma red acompañan nuestras actividades, almacenan información y, a partir de ahí, nos auxilian en el día a día.
Cuando hablamos de “cosas”, nos referimos a cualquier cosa. ¡de verdad! Ya estamos acostumbrados a usar internet con los Smartphones, computadoras, TVs Smart y videojuegos, pero en este contexto la idea no es tener un medio más para conectarse a internet en si, sino hacer con que los dispositivos sean más eficientes. Además de contribuir para optimizar recursos naturales, para la salud y otras inúmeras oportunidades.
CÓMO FUNCIONA IoT
De forma simple, Internet de las Cosas trata de objetos conectados entre si por medio de la red. Estos intercambian información para facilitar o crear diversas acciones. Para que algo así pueda ocurrir hay un conjunto de tres factores que necesitan ser combinados para que una aplicación funcione dentro del concepto de Internet de las Cosas. Estos son: dispositivos, la red y un sistema de control.
Los Dispositivos: Son todos aquellos que ya conocemos, como: refrigeradores, carros, lámparas, relojes, cafeteras, televisión y otros. En estos dispositivos es importante que sean equipados con ítems correctos para proporcionar la comunicación con los demás elementos. Esos ítems pueden ser chips, conexión con internet, sensores, antenas entre otros.
La Red: Es el medio de comunicación y ya estamos acostumbrados a ella. Pues son tecnologías como Wi-Fi, Bluetooth y datos móviles (3G, 4G y 5G).
El sistema de control: es necesario para que todos los datos capturados de los dispositivos a través de red sean procesados, entonces ellos son enviados para un sistema que controla cada aspecto y hace nuevas conexiones.
Para simplificar, imagina tu casa. Ahora piensa en todas las cosas que tienes en tu cocina, como el refrigerador. En ese escenario, el refrigerador podría avisarte cuando un alimento se acabe, puedes hacer una investigación y encontrar mercados con los mejores precios para comprar determinado producto. También te podría sugerir diferentes recetas de comida con las cosas que hay disponibles dentro del refrigerador.
Y ahora, pensando más allá, sobre conectividad; imagina que tu despertador toque por la mañana, y envíe un mensaje para que la cafetera comience a preparar el café y notificar a las cortinas que deben abrirse lentamente. ¿Parece demasiado futurista?
¿Puedes entender el concepto que hablamos anteriormente en acción? Objetos conectados entre sí (el despertador y la cafetera), que intercambian información (hora de despertar y hacer café) para crear una acción (café listo sin preocupaciones).
APLICACIONES DE IoT
Una iniciativa mayor que está surgiendo por estos días son las Ciudades Inteligentes. Estas últimas son ciudades equipadas con redes integradas para garantizar el funcionamiento de una ciudad en general. Como ejemplo de estas ciudades podemos hablar de Tokio y Londres; donde, el concepto de interconexión se aplica a semáforos, cámaras de vigilancia, sistema de transporte público, etc.
Los proyectos de casas inteligentes son apenas algunas de las aplicaciones que la IoT puede tener. Puedes aplicarlas donde quieras, pues todo esto es posible a través de dispositivos que se comunican entre sí a través de Internet.
Puede parecer que este concepto de Internet de las Cosas esté ligado únicamente a grandes empresas y hasta organismos públicos. Sin embargo, también lo puedes ver y aprovechar como una tendencia para negocios.
IoT no es una realidad lejana a nuestros días; no necesitamos ver series de televisión para saber que ya hace parte de nuestra rutina y nuestro estilo de vida. Son muchos los usos y los recursos que podemos optimizar con esta tendencia. ¿Y tú? ¿Tienes dispositivos inteligentes conectados? ¿Aplicas Internet de las Cosas en tu negocio?
Aquí te doy algunos ejemplos:
Pequeños negocios:
Internet de las cosas puede ser aplicado a una tienda o almacén, donde se te comunique instantáneamente el momento en que un ítem sea vendido, y mediante un sensor, se actualice el stock de tu mercancía. O un estacionamiento de carros, donde se sepa exactamente la ubicación del automóvil, y el tiempo que lleva estacionado.
Salud:
En el campo de salud se están desarrollando diferentes sistemas para gestionar la administración de medicamentos; con el fin de acompañar el estado de actividad física, pulsaciones cardiacas, etc.
Agropecuario:
También en el sector agropecuario podemos utilizar IoT. Actualmente existen sistemas con sensores que envían notificaciones sobre el estado de los cultivos, condiciones de clima y control sobre plagas.