El perfil de puesto de los gobernadores regionales y alcaldes del futuro
El próximo 7 de octubre vence el plazo para que los ciudadanos que pretendan participar como candidatos en las elecciones primarias con miras a las Elecciones Regionales y Municipales 2026 cuenten con la condición de afiliado en la agrupación política de su elección. Y este hito, constituye el punto de inicio para elegir a nuestras futuras autoridades regionales y locales. Un proceso así de delicado, amerita un análisis veraz y objetivo sobre el perfil que deben cumplir los gobernadores regionales y alcaldes provinciales/distritales.
Las Elecciones Regionales y Municipales 2026 es el mecanismo por el cual los ciudadanos elegiremos a nuestras futuras autoridades otorgándoles legitimidad democrática a sus gobiernos que tendrán el mandato de implementar políticas públicas que respondan a las necesidades y demandas de la población.
El sistema de partidos políticos en nuestro país está marcado por una crisis de representación, alta fragmentación y un debilitamiento institucional. La falta de ideologías claras y liderazgos auténticos, junto con los problemas de corrupción, han generado un entorno de desconfianza y volatilidad electoral. Esta situación negativa de los partidos políticos repercute directamente en la gestión pública, debilitando la capacidad del Estado para gobernar de manera eficiente y transparente. La inestabilidad política, la falta de continuidad en las políticas públicas, la corrupción, y la falta de planificación a largo plazo son algunos de los efectos más notorios.
Dada la situación actual y los retos que enfrenta una gestión pública moderna, estas deben ser las competencias, requisitos y exigencias que debe tener una futura autoridad regional o local:
- Experiencia en gestión pública: Los futuros líderes deberían haber acumulado experiencia previa en roles administrativos o de gestión pública, lo que les permitirá tener una comprensión más profunda de los retos que enfrenta el gobierno local o regional.
- Conocimientos técnicos: Un gobernador o alcalde debe contar con conocimientos sólidos en administración pública, presupuesto, planificación estratégica y gestión de proyectos. Esto les permitirá manejar los recursos de manera eficiente y asignarlos adecuadamente.
- Visión de desarrollo regional/local: Los futuros gobernadores y alcaldes deben tener una visión clara de desarrollo integral de sus territorios, basada en diagnósticos participativos bien fundamentados. Esta visión debe incluir metas a largo plazo que promuevan el desarrollo.
- Planeamiento estratégico: Deben estar capacitados para planificar a largo plazo, superando la tendencia a implementar medidas de corto plazo. Esto implica la capacidad de diseñar y ejecutar proyectos de impacto y generar empleo sostenible.
- Manejo de tecnología y datos: El conocimiento sobre la transformación digital y el uso de datos para la toma de decisiones debe formar parte del perfil de los gobernadores y alcaldes. La digitalización de los servicios públicos puede mejorar la eficiencia y la capacidad de respuesta.
- Compromiso con la ética pública: Los futuros gobernadores y alcaldes deben ser personas que promuevan y practiquen altos estándares éticos en su gestión. Esto incluye ser transparentes en el uso de recursos, evitar conflictos de interés y rendir cuentas de manera clara y periódica.
- Liderazgo en la lucha contra la corrupción: Dada la alta prevalencia de corrupción e inconductas funcionales en muchas administraciones regionales y municipales, es crucial que los nuevos líderes tengan un compromiso auténtico en la lucha contra esta problemática. Deben implementar mecanismos efectivos de control y rendición de cuentas.
- Promoción del desarrollo inclusivo: Los futuros líderes deben asegurar que el desarrollo llegue a todos los rincones del territorio, con especial énfasis en las comunidades campesinas e indígenas y las poblaciones vulnerables, respetando su diversidad.
- Habilidad para generar consensos: Dada la fragmentación política, los futuros líderes regionales y municipales deben ser capaces de generar consensos entre diversos actores políticos, sociales y académicos para evitar conflictos que puedan paralizar la gestión pública.
- Diálogo con el gobierno central: Los gobernadores y alcaldes deben ser capaces de mantener una buena relación con el gobierno central, sin perder su autonomía. Deben conseguir financiamiento y asistencia técnica para la ejecución de proyectos de impacto.
- Participación ciudadana: La inclusión de la ciudadanía en la toma de decisiones debe ser un principio fundamental. Los gobernadores y alcaldes deben promover mecanismos participativos para involucrar a la población en el diseño e implementación de las políticas públicas.
- Sostenibilidad ambiental: Los futuros gobernadores y alcaldes deben tener un compromiso claro con la gestión ambiental. Deben promover políticas y proyectos que aseguren el desarrollo sostenible, la protección de los recursos naturales y la adaptación al cambio climático.
- Gestión de riesgos y desastres: En un territorio propenso a desastres naturales como terremotos, inundaciones incendios y huaycos, los futuros líderes deben tener conocimientos y planes sólidos para la gestión de riesgos y desastres, asegurando que sus territorios tengan una capacidad de respuesta rápida ante emergencias.
- Habilidad para captar y gestionar recursos: Los futuros gobernadores y alcaldes deben tener capacidad para gestionar recursos financieros nacionales e internacionales, y maximizar la inversión pública en sus jurisdicciones. Esto incluye la capacidad de formular proyectos que atraigan el financiamiento por parte del gobierno central y de la cooperación internacional.
- Eficiencia en la ejecución presupuestaria: Es fundamental que los líderes tengan un enfoque eficiente en la ejecución del presupuesto público, evitando la mala asignación de los mismos. La eficiencia en la ejecución presupuestal es clave para mejorar la calidad de vida de la población.
- Liderazgo cercano a la población: Un buen alcalde o gobernador debe ser accesible y estar en contacto directo con la población. La empatía y la capacidad de escuchar las necesidades de los ciudadanos son fundamentales para recuperar la confianza de la población.
- Contacto con las comunidades nativas y campesinas: En contextos donde hay diversidad cultural, los futuros líderes deben ser sensibles a las particularidades de cada comunidad campesina o nativa, reconociendo sus tradiciones, valores y formas de organización.
- Capacidad de innovación: Los líderes regionales y municipales deben estar dispuestos a adoptar nuevas formas de gestión y tecnología que mejoren la eficiencia de los servicios públicos. Esto incluye el uso de herramientas digitales para mejorar la administración pública en general.
- Flexibilidad y capacidad de adaptación: Dado el entorno cambiante del país y la necesidad de responder rápidamente a crisis como pandemias, desastres naturales o problemas económicos, los futuros gobernadores y alcaldes deben ser flexibles y capaces de adaptarse a nuevas circunstancias y desafíos.
El futuro del Perú depende de la capacidad de sus líderes regionales y locales para superar la situación actual. Si para contratar a un servidor público para el cumplimiento de labores administrativas se exige el cumplimiento de lo establecido en el perfil del puesto, con mucha más razón se debe exigir el cumplimiento de un perfil mínimo para ser autoridades regionales y locales. El éxito de la gestión pública no solo radica en la voluntad política, sino en la habilidad, la honestidad y la capacidad para trabajar coordinadamente con la población.