¡Auxilio, Huánuco se muere!

Huánuco sufre por el contagio masivo y las muertes que provoca el temido virus. Hay mucha desesperación de los familiares de pacientes con covid-19 en busca de oxígeno que es escaso en la ciudad. Otros buscan en las farmacias las medicinas como la ivermectina que, del mismo modo, son escasas. Es triste ver a familiares impotentes que solo se resignan a recibir la noticia de la muerte de sus seres queridos. Las muertes van en aumento a diario.

Se había alertado que Huánuco no estaba preparado para enfrentar esta pandemia. Nuestro sistema de salud es muy precario, no tenemos hospitales suficientes, ni personal de salud, ni equipamiento, es por ello que ahora lo vemos colapsado: muchos pacientes atendidos en pasadizos, carpas y ambientes no adecuados.

HOSPITALES DE HUÁNUCO

En este momento cuando más los necesitamos, es una pena y rabia ver a nuestros dos hospitales inconclusos, uno en la ciudad de Huánuco y el otro en Tingo María. El perfil para la construcción del hospital de Huánuco inició en el 2007. Pasaron 10 años para iniciar su construcción: 2017 para finalizar en diciembre 2018. Hasta la fecha pasaron más de un año y medio del plazo de ejecución y está inconcluso. En este hospital que tiene una capacidad de 120 camas y que el Estado invirtió un aproximado de 162 millones con la finalidad de que sirva a la población huanuqueña; sin embargo, no podemos utilizarlo por la ineficiencia de nuestra autoridades (2007-2020). Son casi 13 años desde que se inició el estudio. Siento mucho decir que por un grupo de personas que buscan solo su beneficio personal, perjudicaron y atentaron contra la vida de los pobladores, obstaculizaron en todo momento la construcción y a eso se suma las deficiencias del proyecto desde el inicio.

«Si las autoridades de Huánuco no reaccionan frente a esta pandemia, esto puede terminar en una catástrofe»

NUESTRAS AUTORIDADES INOPERANTES

Se dice que es fácil opinar y culpar después del hecho, pero debo decir que gran parte de responsabilidad de este colapso del sistema de salud y del contagio masivo lo tienen nuestras primeras autoridades: el gobernador regional y alcalde provincial, quienes no tienen liderazgo y prueba de ello es la pobre gestión que vienen realizando. En mal momento les permitimos la oportunidad de gobernar. Nuestras autoridades se pasaron en reuniones no productivas, tuvieron débil concertación, no tomaron acciones en serio, se puede decir que cada sector lo hizo por su lado (Gobierno Regional, Municipalidades, Dirección Regional de Salud, Policía Nacional y otras entidades). Muestra de ello es que hasta la fecha vemos calles con rejas y bloques de cemento que obstaculizan el tránsito, que hacen que las personas se aglomeren en los alrededores del mercado, ya que no pueden comprar para la semana (por falta de acceso de vehículos). Todo ello hace que muchas personas tengan que salir a comprar casi a diario. Señores autoridades, cerrar las calles no dio resultado, y eso se alertó en su oportunidad.

La falta de liderazgo, compromiso, vocación, anticipación, reacción y capacidad de gestión de nuestras autoridades de la región y locales nos está llevando a una desgracia que está enlutando a muchas familias huanuqueñas. El gobierno central destinó un presupuesto para covid-19, lo cual sólo se ejecutó 27.8%, quizá esté devengado una parte, pero no es posible que en plena emergencia sanitaria, donde hay mucha necesidad, no puedan gastar, a eso se llama incapacidad de gestión.

ALGUNOS ALCALDES QUE ESTÁN EN “GUERRA” CONTRA LA PANDEMIA         

Sin embargo, vemos algunos alcaldes como Antonio Pulgar Lucas del distrito de Amarilis, Joel Cruz Gutiérrez del distrito de San Rafael y otros alcaldes que están trabajando en esta pandemia “al soldado se ve en la guerra”, que a pesar de limitación presupuestal, riesgo de contagio, están demostrando capacidad de gestión, vocación, reacción frente a esta pandemia. Están presentes en las diversas actividades, mientras que otros están “escondidos” o simplemente no se observa su accionar.

RESPONSABILIDAD COMPARTIDA

Para esta desgracia que estamos atravesando en la ciudad de Huánuco, también tenemos mucha culpa compartida los ciudadanos. No tomamos en serio la cuarentena, no utilizamos adecuadamente los protectores como mascarilla y de cara, no respetamos a distancia social, no acatamos las restricciones, etc.

Los dos factores claves para afrontar esta pandemia no están funcionando. Por una parte, la población que ignora la magnitud de este virus y no toma conciencia; y por otra parte, las autoridades que son inoperantes, sin capacidad de reacción, con corrupción. Todos ello es combustible para que se expanda este virus que es altamente contagioso y lleve al colapso al sistema sanitario.

Hasta el cierre del día 22 de julio tenemos 9 152 infectados y 278 muertos. Es alarmante el aumento diario de contagiados y de muertos. Nuestras autoridades deben exigir urgente el apoyo al gobierno central, no solo es Arequipa, también Huánuco existe y exige la atención ante este abandono.