Malas señales
El 2023 está próximo a concluir y el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) no ha podido transferir a los Gobiernos Regionales del país el total de la planilla de diciembre de los docentes activos e inactivos. Si en Huánuco se ha pagado, ha sido sacrificando el pago de la deuda social, de acuerdo con lo expuesto por la gerenta general del Gobierno Regional, Leslie Zevallos.
La situación solo puede explicarse desde la falta de liquidez o financiamiento en las arcas nacionales, lo que es sumamente preocupante.
Hoy es el último día hábil del año en el país. Y en el MEF no parecen haber señales de querer cubrir ese déficit. Y, acaso, para cerrar en azul le está negando a los Gobiernos Regionales usar sus saldos presupuestales para que estos regresen al fisco y la caja aparezca con fondos, aunque en verdad arrastre una deuda.
Las señales desde el Ejecutivo son preocupantes. El Presupuesto General de la República se ha incrementado para el 2024, pero ha caído la recaudación tributaria. Estamos en recesión económica y los bonos, incrementos de salarios y otras gollerías como las de los congresistas son moneda corriente en nombre de incrementar el gasto ciudadano, en vez de sanear la crisis política que nos está arrastrando a la crisis económica que nos puede devolver en un tiempo no muy lejano a las épocas del primer gobierno de Alan García.
En el último día hábil del año 2023, que comenzó convulsionado por las protestas contra Boluarte, tiene malas señales económicas.