Minando la democracia
El último reporte del Barómetro de las Américas reveló que solo el 19 % de los peruanos se encuentra satisfecho con el funcionamiento de la democracia. Esa cifra nos pone en el último lugar en Sudamérica y solo por delante de Surinam (13%) y Haití (12% ) en América Latina y el Caribe.
La insatisfacción de los peruanos con la democracia ha venido in crescendo, lo que resulta muy peligroso, pues facilitaría la instalación de una dictadura en el corto tiempo.
La actuación de este Congreso de la República, avalado por el régimen de Dina Boluarte, no hacen más que justificar ese descontento popular.
El gran drama de nuestra democracia es que no tenemos partidos políticos, sino organizaciones para delinquir. Y es tanto así que, para cubrirse de las acciones legales, este Congreso ha aprobado una ley que elimina la responsabilidad penal de estos en delitos que se les impute.
A la fecha, organizaciones políticas como Fuerza Popular, Perú Libre, Podemos Perú, y Renovación Popular —que impulsaron y aprobaron dicha ley en el Congreso que controlan— son investigados por la fiscalía por una serie de delitos que incluyen presunto lavado de activos y falsificación de firmas.
Los partidos políticos son uno de los pilares de la democracia; pero si estos se convierten en organizaciones criminales entonces se mina la democracia y se instaura el camino hacia la dictadura. Parece que estamos en el camino.