Rápido y público

El director de la UGEL Huánuco, Francisco Pérez Naupay, ha anunciado que el Órgano de Control Institucional (OCI) de su institución revisará el proceso de nombramiento de docentes para detectar las posibles irregularidades denunciadas públicamente, entre ellas los certificados de discapacidad para falsos discapacitados docentes.

Meses atrás, en pleno concurso, se hizo público la venta de certificados médicos de discapacidad entre docentes a fin de obtener la bonificación que asigna la ley y tener ventaja frente a sus colegas en la puntuación y conseguir el ansiado nombramiento.

Aun cuando la denuncia fue pública, en el sector Educación no implementaron ninguna medida a fin de detectar a los docentes con falsa discapacidad y retirarlos del concurso por su actuar deshonesto y delictivo.

Algo que el OCI y las autoridades del sector Educación deben tener presente al momento de la revisión del proceso de nombramiento —si finalmente lo hacen— es que esos certificados de discapacidad son originales, están firmados por un médico certificador de discapacidad. Entonces, ¿cómo detectar a los falsos discapacitados? Es el desafío que tendrán las autoridades encargadas de revisar el proceso. Un primer indicio puede ser la cantidad de certificados firmados por el mismo médico certificador. ¿Cómo confirmar o descartar la discapacidad del docente? Ahí está desafío. El Colegio Médico podría ayudar. Cualquiera que sea la fórmula, que sea rápida y pública.

 

     
 

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