Solos se engañan

El desaire sufrido anoche por el gerente de Desarrollo Social del Gobierno Regional, Aldo Reyes Viviano, por parte del alcalde provincial, Antonio Jara, y la mayoría de regidores revela una actitud despótica de estos.

El bloqueo primero de la puerta del salón donde se realizaba la sesión y el voto para no permitir la exposición del funcionario regional sobre un convenio propuesto por el Gobierno Regional, parecen haber estado sincronizados. Lo que hace más preocupante la actitud de los que hoy detentan el poder municipal.

¿Qué impedía al alcalde y a los regidores permitir la exposición de Reyes Viviano si ya lo había pedido una regidora, como corresponde según el procedimiento fijado? La respuesta puede estar en la soberbia, en el abuso del poder conferido por la ciudadanía.

Por una elemental cuestión de buenos modales, debió admitirse la participación de Aldo Reyes y explicarle que ya no era necesaria su exposición porque ya habían decidido aprobar el convenio que iba a sustentar, como finalmente ocurrió con el voto unánime.

Por lo demás, no es la primera vez que el despotismo se instala en la Municipalidad de Huánuco. Ya ocurrió y quienes lo ejercieron enfrentan procesos judiciales y generan rechazo en la población. Si «Toño» Jara y sus regidores aspiran seguir su carrera política, es mejor que empiecen a cambiar de actitud, dejen de usar portátiles en las sesiones. Solos se engañan. Ya ocurrió en el pasado reciente.

     
 

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