Capitán PNP y brigadier con prisión preventiva
Juez continúa audiencia contra otros cinco policías
El capitán PNP Jeysson Calampa Chuquimbalqui y el brigadier Juan Gutiérrez Córdova pasarán nueve meses en prisión preventiva por decisión del juez anticorrupción Samuel Cabanillas Catalán que ayer resolvió el requerimiento fiscal. La audiencia iniciada el sábado continúa hoy para los otros cinco implicados en la ilegal liberación de dos sospechosos de violación.
Pese a que sus abogados y ellos mismos negaron haber recibido dinero como lo sostiene el Ministerio Público, el juez consideró que habría indicios de recibimiento de 3 000 soles.
En el caso de Calampa, su defensa señaló insistentemente que su labor como comisario es netamente administrativo y que los elementos de convicción no lo vinculaban con el delito investigado, que los efectivos que intervinieron a los presuntos agresores sexuales estaban en la obligación de entregar a los detenidos con las respectivas actas y dar cuenta al fiscal.
En su declaración, el oficial investigado manifestó que en horas en que los sujetos Gustavo Paúl Cecilio Lastra y Emerson Pablo Salvador Lastra, estuvieron en la comisaría él se encontraba fuera de la dependencia policial, que el suboficial encargado del área de delitos no le dio cuenta de dicha intervención.
En su caso, la Fiscalía lo investiga por los delitos de cohecho pasivo propio en el ejercicio de la función fiscal y falsedad ideológica, éste último delito es porque habría mentido en su informe al Departamento de Investigación Criminal (Depincri) al indicar que Gustavo y Emerson no estuvieron detenidos, ni retenidos.
Para el juez Cabanillas, el oficial investigado sí estuvo en la comisaría y tuvo conocimiento de la detención. Para decir ello se basó en las declaraciones del testigos en reserva, un efectivo policial que detalló cómo es que sus colegas salieron a detener a dos sujetos que habrían violentado a dos escolares, a qué oficinas los llevaron, las conversaciones entre la familia de una de las agraviadas con la de uno de los detenidos, así también con sus colegas.
Fue dicho testigo quien señaló que el capitán le dijo al encargado de la puerta que el bajaj es parte de la denuncia y no vaya a dejar ir que se retire.
Según el testigo, el brigadier Gutiérrez y el suboficial Gonzales quienes le informaron al capitán Calampa «de que ya habían dado solución, y que ya se podían retirar la menor y sus acompañantes, que no pasaría nada más adelante…».
Otros efectivos también ubican a Jeysson Calampa en la comisaría.
Sobre el cuestionamiento del abogado de que estaba acreditado la entrega del dinero, para el juez sí había indicios: la versión de un menor al familiar de una de las víctimas de que Gustavo Cecilio le comentó que pagó 3 000 soles para salir, la versión del suboficial Hans Canto de que escuchó que el familiar de uno de los detenidos ofrecía dinero a la madre de una de las víctimas.
Al sustentar sobre la pena que le correspondería al capitán Calampa Chuquimbalqui, el fiscal Edwin Coaquera sostuvo que la pena a imponérsele sería7 años y 2 meses por cohecho y 3 años por falsedad.
BRIGADIER
En lo que respecta al brigadier Juan Gutiérrez quien tenía el cargo de comandante de guardia, el fiscal sostuvo que omitió sus funciones «al no haber ordenado a sus subalternos para que procedan a registrar la denuncia que formulaban la madre y tía de las menores de 13 y 12 por un hecho de agresión sexual, así como tampoco realizar las acciones urgentes y necesarias para el esclarecimiento de los hechos; de igual manera, no haber registrado a las personas de Gustavo Paul Cecilio Lastra y Emerson Pablo Salvador Lastra como detenidos en la comisaría así como tampoco dio cuenta de dichas detenciones al fiscal penal de turno»
En su declaración, dicho investigado manifestó que como comandante de guardia no puede interferir en las diligencias que realiza el personal de las diferentes secciones, y que sus funciones son otras.
Pero según algunos de sus colegas investigados y el testigo en reserva, Gutiérrez estuvo en todo momento pendiente de lo que se hacía respecto al caso.
Incluso, contra él y el capitán, habría evidencias de que estuvieron coordinando con los otros suboficiales a fin de dar una misma versión, incluso a través de un abogado pretendían obtener «por lo bajo» de la carpeta fiscal contra ellos.
En su caso, el fiscal sostuvo que la pena de cárcel que le impondrían en caso de encontrarle responsabilidad sería superior a los 6 años.