Asesinan a indígena que vivía en límites de Huánuco y Ucayali

El joven indígena cacataibo Herasmo García Grau fue hallado muerto el último viernes en la selva de San Alejandro, en la comunidad Puerto Nuevo, distrito de Irazona, provincia de Padre Abad (Ucayali) con un impacto de escopeta en el pecho y golpes en el rostro. Su muerte, según denunciaron los líderes indígenas de Ucayali y Huánuco fue a manos de mafias que operan entre estos dos territorios.

García pertenecía a la comunidad indígena Sinchi Roca I, que tiene su territorio entre los distritos de Codo del Pozuzo (Huánuco) e Irazona (Ucayali), y solicitaba a los gobiernos regionales de ambas jurisdicciones realizar la georreferenciación y actualización de títulos de su territorio, puesto que recibieron este documento en 1976.

Pero el trámite no se realiza hasta hoy. Según el gerente de Pueblos Indígenas de Ucayali, Harol Salcedo, es «el Gobierno Regional de Huánuco los que no cumplieron con la georreferenciación» para actualizar los títulos.

«La Dirección Regional de Agricultura realizó el proceso en el 2018, pero no lo consignó en Registros Públicos porque no se terminó en trabajo por el lado de Huánuco», dijo.

Para Mar Pérez, jefa de la Unidad de Protección de los Defensores de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, el no avanzar con estos trabajos que brindan seguridad jurídica a los territorios indígenas se permite el avance de las actividades ilegales.

«Los gobiernos regionales dan prioridad a la titulación individual por encima de los pueblos indígenas», señaló. Preciso que en Huánuco las municipalidades locales han creado asociaciones de vivienda o caseríos irregularmente dentro de los territorios indígenas, como en el caso de la comunidad Unipacuyacu, en Codo del Pozuzo, o la comunidad Nueva Austria del Siria.

Pero la muerte de Herasmo García no fue la única que se reportó. También está el caso del indígena cacataibo Yenes Ríos Bonsano, quien fue hallado muerto el 14 de febrero con un disparo en la cabeza y signos de tortura.

Ríos pertenecía a la comunidad Puerto Nuevo, que también tiene parte de su territorio en Huánuco. El líder Herlin Odicio de la Federación Nativa de Comunidades Cacataibo señaló que «no hay justicia para los indígenas pese a que denuncian a los ilegales».

Dijo que el pueblo cacataibo vive con miedo y no confía en sus autoridades porque permiten que los invasores ingresen dejándolos de lado.