Con asistencia técnica buscan reducir daños por plagas en cultivos de cacao y café
TINGO MARÍA-Emer Arangüez
Mil quinientas familias productoras de café y cacao de 65 comunidades de tres provincias del departamento de Huánuco recibirán asistencia técnica a través de la actividad Sanidad Vegetal. Un equipo de profesionales les dará asistencia técnica personalizada, centrándose en el manejo integrado de plagas y enfermedades.
El objetivo de la actividad —se informó— es desarrollar capacidades, habilidades y destrezas para la adopción de tecnologías y buenas prácticas agrícolas, a fin de reducir el nivel de daño ocasionado por plagas y enfermedades en los cultivos de cacao y café de 1500 familias productoras.
«De esa manera a cargo de los profesionales de Devida, se impulsará y fortalecerá el desarrollo alternativo, integral y sostenible en las zonas estratégicas de intervención, con el fin de promover el Modelo Perú de desarrollo productivo», así afirmó el ejecutivo zonal de Devida Tíngo María, Jordan Herrera Aranda
«Esto facilitará a los participantes conducir sus fincas con visión empresarial, generando iniciativas de negocio vinculados a la cadena productiva y cadena de valor, haciendo un uso eficaz de los recursos existentes, fortaleciendo capacidades técnico productivas y de gestión, mediante un trabajo articulado con los gobiernos locales, Senasa, Midagri y la inversión privada», sostuvo Herrera Aranda.
«Los productores que recibirán esta asistencia son de los distritos Jircán y Monzón en la provincia de Huamalíes; Mariano Dámaso Beraún, Daniel Alomía Robles, Pucayacu, José Crespo y Castillo, Pueblo Nuevo y Santo Domingo de Anda en Leoncio Prado y; La Morada y Cholón en Marañón, donde se han priorizado 900 hectáreas de cacao y 600 hectáreas de café pertenecientes a 1500 familias», detalló Jordan Herrera.
La actividad utilizará la metodología de capacitación a través de la asistencia técnica personalizada de fvorma presencial, centrándose en el manejo integrado de plagas y enfermedades, con énfasis en la prevención y control, que permita que la mayor parte de las prácticas agrícolas sean adoptadas a través de ejercicios participativos en la finca por los agricultores y su familia», puntualizó.