Hermilio Valdizán Medrano
♦ Científico humanista de la psiquiatría
♦ Símbolo de la medicina tradicional peruana
Com. Social-Pilar Trujillo Martel
En esta tierra de mañanas luminosas y coloridos atardeceres, nace en Huánuco Hermilio Valdizán Medrano el 20 de noviembre de 1885, hijo de su homónimo padre don Hermilio Valdizán y de doña Juana Medrano. Sólo 09 años gozaría de la tibieza de esta tierra.
En 1894, Hermilio Valdizán se traslada a Lima, para estudiar la secundaria bajo la dirección de Pedro A. Labarthe. Luego, haciendo realidad sus sueños y persistiendo en sus ideales, en 1903 ingresa a la Facultad de Medicina de la Universidad Mayor de San Marcos.
En 1909 se graduó como bachiller en Medicina con la tesis «La delincuencia en el Perú», y opta por el título de médico cirujano al año entrante, para gloria de la medicina en nuestra patria.
Dos años después Hermilio Valdizán fue becado por el gobierno peruano para hacer su residencia en Europa, específicamente en la ciudad de Bologna, Italia entre los años 1911 y 1914, asistiendo a la Escuela Italiana de Enfermedades Mentales y del Sistema Nervioso.
De regreso al Perú, alcanza el grado de doctor en medicina en 1915, gracias a su innovadora y exitosa tesis «La alienación mental entre los primitivos peruanos».
Tan involucrado como estaba con el desarrollo de la psiquiatría en el Perú, Hermilio Valdizán, creó el primer Consultorio Externo de Enfermedades Nerviosas y Mentales en el Hospital Dos de Mayo, y a la brevedad fundó en 1916, la cátedra de Enfermedades Nerviosas y Mentales en la Universidad Mayor de San Marcos. Siempre contra el tiempo, en 1917, Hermilio Valdizán publica junto a Honorio Delgado, su discípulo, el primer número de la revista de «Psiquiatría y Enfermedades Convexas».
A partir de 1921, dirigió el Asilo-Colonia Víctor Larco Herrera, en el distrito de Magdalena, y posteriormente fue nombrado director del Hospital Psiquiátrico del mismo nombre. Allí fomentaría el trato humano hacia la persona fuera de conciencia -loco- como el que se dispensa a un paciente común, en libertad. Así, humaniza la psiquiatría en el Perú, esa es su gran contribución. Pero, esta percepción la complementa con la ergoterapia, es decir el tratamiento del paciente mediante el trabajo, creando talleres que permitan su desenvolvimiento ocupacional.
El Dr. Hermilio Valdizán, innovador siempre, crea la especialidad de Medicina Forense en la Facultad de Derecho en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. En la sociedad peruana, resultaba necesario los peritajes médicos, en caso de un accidente, una agresión o una muerte.
Valdizán Medrano asumió como su otra gran tarea el rescate de la medicina tradicional peruana. Se dedicó acusiosamente al estudio de la historia de la medicina peruana y del folklore médico como las tradiciones, las costumbres, es decir, al conocimiento y valoración de la medicina psicosomática de los antiguos peruanos.
La sabiduría de Hermilio Valdizán se desplegó también hacia la esfera del periodismo desde su juventud. Fue cronista en el diario El Tiempo y La Prensa, bajo el seudónimo de Juan Serrano. Su labor periodística responde a sus esfuerzos de vocación científica, de allí el valor de sus publicaciones, como su tesis denominada «La alienación mental entre los antiguos peruanos», y su primera obra cumbre titulada: «La Facultad de Medicina en Lima 1811-1911».
Destacan sus publicaciones como: «Diccionario de Medicina Peruana», del cual solo salieron a la luz pública dos tomos y quedaron seis inéditos, hasta su publicación denominada «Anales de la Facultad de Medicina desde 1856». Con la colaboración de Ángel Maldonado publica «Apuntes para la Bibliografía Médica Peruana», «Bibliografía de Unanue», «Los Médicos Italianos en el Perú», «Historia de Enfermos», «Locos de la Colonia», y «A Ti que eres Padre».
Sólo 44 años le fueron necesarios a Hermilio Valdizán Medrano para legar tan monumental obra humanística a la sociedad peruana y a la medicina universal. Dejó de existir un 25 de diciembre de 1929 siendo director del Hospital Larco Herrera. La medicina peruana perenniza su homenaje a este huanuqueño inmortal, el día que naciera (20/11/1885), como el Día de la Psiquiatría Peruana.
Queda, a las generaciones de médicos que se forman en la universidad que lleva su nombre, asumirlo como su paradigma, por haber ejercido la medicina como un apostolado. Es decir, por su legado, grandioso y vigente.