Sor Juana Inés de la Cruz “primera mujer contadora”
Me llamó la atención que Sor Juana Inés de la Cruz fuera considerada la primera mujer que practicó la Contabilidad, toda vez que la recordaba sólo por un poema, pero tiene una vasta producción como escritora, poetisa, etc. pero nos preguntamos ¿quién fue Sor Juana Inés de la Cruz?
Wikipedia nos dice: Juana Inés de Asbaje Ramírez de Santillana nace el 12 de noviembre de 1648 o 1651 en la ciudad de México …, más conocida como “Sor Juana Inés de la Cruz” o “Juana de Asbaje”, fue una religiosa jerónima y escritora novohispana, exponente del Siglo de Oro de la literatura en español. También incorporó el náhuatl clásico a su creación poética. Considerada por muchos como la “décima musa”, cultivó la lírica, el auto sacramental y el teatro, así como la prosa. …. Sor Juana murió a causa de una epidemia el 17 de abril de 1695 en el Convento de San Jerónimo.
Sor Juana Inés de la Cruz, fue un portento de la literatura en tres siglos de la época Colonial, su poesía, nutrida de complejas figuras del lenguaje, hondura filosófica, conceptos perspicaces, fascinante estética sonora e inspiración refinada; hacen de sus obras los poemas líricos, cortesanos y filosóficos; las obras musicales; las comedias teatrales; las obras religiosas; los aportes a la Astronomía y villancicos llenos de gracia; escritos dignos de admiración, perfilándose como una figura importante en la historia de la Literatura Universal, quien tuvo los sobrenombres de la “Décima musa” (costumbre griega) y del “Ave Fénix de América” por la calidad y trascendencia de sus obras; y, por ser la mujer más destacada de su época. Tiene también el valor de identificar los problemas de la mujer y defender su derecho a la Educación; con sus escritos reivindicó el rol femenino en el conocimiento y expresó en esa época tan oscura ideas y convicciones que aún no habían sido difundidas.
Sor Juana Inés de la Cruz a los 21 años (1669) ingresa al convento de San Jerónimo (Puebla) profesándose como religiosa. En su estancia durante el período 1686 – 1695 -cuando tenía de 38 a 47 años- fue la encargada de llevar las cuentas del quehacer económico del convento, requiriendo esta labor de conocimientos de control (matemáticas) y de administración, así como también conjugó la expresión poética con conceptos contables.
Como poetisa dejó plasmada su labor contable en el Villancico III (composición musical), que dice:
A un inicio habla de San Pedro que después de haber verificado (ajustado) los datos, informa a Dios sobre los actos humanos; el apóstol como Clavero (Contador de Catedral) con toda dignidad tiene a cargo la custodia de las riquezas, y si no reconocen con control los obliga, pero también otorga autorizaciones para no cumplir con lo ordenado y condona la deuda a los que menos tienen; así como después de cuadrar las cuentas con los representantes con honestidad reparte el Patrimonio. Se observa la aplicación de normas y el registro de causa – efecto que podemos relacionar con la Partida Doble.
De esta manera Sor Juana Inés de la Cruz relaciona a la Contabilidad con las Matemáticas, incorporando términos propios de la Contabilidad en sus composiciones, que implican un orden y un método, llevando la Contabilidad del comportamiento humano y conjugando al Patrimonio con su espíritu religioso.
En conclusión, en mérito a sus escritos a Sor Juana Inés de la Cruz se le considera como la primera mujer que desempeñó esta noble profesión al responsabilizarse del llevado de la Contabilidad del convento y haber dejado un formidable legado sobre su obra y trabajo.